Radiohead - Kid A

Este disco es un clásico. ¿Por qué?

Radiohead fue considerada originalmente “one hit wonders” por el éxito masivo de su single Creep en 1993, pero en 1995 sacaron The bends y le tapó la boca a todo el mundo. El disco era excelente y pasaron de ser mirados con desdén a ser considerados uno de los grupos más interesantes de la escena alternativa del rock británico. Ya para 1997 la banda liderada por Thom Yorke –uno de los frontman más improbables del rock, con su falsete distintivo y su personalidad retraída– había cosechado un gran caudal de críticas positivas y éxito comercial cuando lanzaron su tercer álbum, OK computer. Y las cosas se les fueron de las manos. El disco fue considerado una obra maestra absoluta, comparado con discos como Dark side of the moon y Sgt. Pepper's, y pronto Radiohead se convirtió en la banda de referencia de finales de los 90s, que inspiró el sonido de  bandas venideras como Muse y Coldplay. Hay un film llamado Meeting people is easy  sobre la gira de Ok computer que muestra a la banda avasallada por el trato de la prensa, la interminable gira y el acoso de los fans. Una banda que cantaba sobre la alienación, la paranoia y la depresión del sujeto en la vida moderna, agobiados por su propio éxito inesperado; en especial el propio Yorke, sufriendo ataques de nervios.

¿Que hace la banda que lanza el disco que termina definiendo el rock de una época? Patea el tablero y decide hacer borrón y cuenta nueva. Yorke instó a la banda a buscar nuevos sonidos, inspirados en artistas de IDM como Aphex twin y Autreche, también con algunas influencias de jazz y rock experimental. Texturas minimalistas, ritmos electrónicos, paredes de sonido ambiental, voces distorsionadas con herramientas digitales. Las letras de los temas se volvieron más abstractas, generalmente sin sentido.Yorke declaró que quería usar su voz como si fuese un instrumento más, olvidándose de las melodías y concentrándose en las texturas. Incluso para la promoción del álbum no sacaron singles ni ningún video, sino que publicaron clips de corta duración en internet (cuando internet no era la industria gigantesca que es hoy en día, sino un territorio desconocido para la mayoría de las bandas). También dieron contadas entrevistas a la prensa. Fue el primer disco mainstream promocionado a través de internet. Actitudes como estas probaban el rechazo que sentía Radiohead hacia la industria musical, una actitud que se  iría incrementando aún más en trabajos posteriores.

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En resumen, fue un salto al abismo gigantesco, algo que no acostumbran a hacer las bandas que se encuentran en la cima de su carrera. ¿Y cuál fue el resultado? Un éxito rotundo. Si bien la crítica no sabía que decir sobre los presuntos "salvadores del rock" que habían cambiado las guitarras por sintetizadores y cajas de ritmos, había tanta expectativa por el álbum que una vez que fue lanzado alcanzó el status de platino en la primer semana en Inglaterra. Hoy en día es considerado por la mayoría de las publicaciones musicales como uno de los mejores discos de la década. La ironía de una banda que renegando de su condición de superestrellas saca el disco más experimental y abrasivo que consiguen hacer, con poca difusión y aún así son aclamados. Radiohead está condenado al éxito.